En el mercado de autopartes, construir un catálogo digital eficiente es una de las etapas más críticas del proceso de digitalización. A través de este catálogo, fabricantes, distribuidores y minoristas pueden organizar, divulgar y vender sus piezas con mayor precisión y escalabilidad. Según el E-commerce Quality Index, el 96% de los e-commerce en Brasil todavía falla en ofrecer una buena experiencia de compra, muchas veces por la baja calidad de la información en los catálogos de productos.
1. Falta de una estrategia clara de catalogación
Antes de digitalizar los productos, hay que preguntarse: ¿para quién se está creando este catálogo? ¿Qué canales de venta se van a usar? ¿Qué categorías tendrán prioridad? Una estrategia efectiva debe considerar no solo el volumen, sino también la estructura, consistencia e integración con marketplaces y sistemas de gestión (ERP/DMS).
2. Desconocimiento sobre dónde se va a publicar el catálogo
Cada canal de venta tiene sus propias exigencias técnicas. Publicar en un marketplace como Mercado Libre o vender desde un e-commerce propio requiere formatos distintos de imagen, estándares de descripción y estructura de categorías. Ignorar esas diferencias puede perjudicar el rendimiento de los anuncios y generar rechazo en los consumidores.
3. Falta de recursos y definición de responsabilidades
Sin un equipo dedicado al armado y mantenimiento del catálogo, el proceso se vuelve lento y propenso a errores. Es clave decidir desde el inicio si el trabajo será interno, tercerizado o acompañado por una plataforma especializada en autopartes. Esta decisión impacta directamente en la calidad y rapidez del proyecto.
4. Información incompleta o mal estructurada
Descripciones técnicas incompletas, falta de atributos como año/modelo/compatibilidad y ausencia de códigos SKU afectan tanto la venta como el posventa. Cuanto más detallada y precisa sea la ficha del producto, menores serán las devoluciones y reclamos. Esto es especialmente relevante en el rubro de reposición automotriz.
5. Falta de tiempo y personal para mantenimiento
El trabajo no termina con la publicación inicial: el catálogo debe mantenerse actualizado. Los precios, el stock, las aplicaciones y las imágenes cambian con el tiempo. Sin un equipo enfocado en esta rutina, el catálogo pierde vigencia y compromete la experiencia del comprador.
6. Desconocimiento de los marketplaces y sus requisitos
Vender autopartes en marketplaces exige conocer las reglas específicas de cada canal. Reglas de imagen, atributos obligatorios, categorías y compatibilidades deben ser cumplidas para que el producto sea visible. Plataformas como Mercado Libre y Amazon utilizan filtros técnicos que, si no están bien completados, pueden hacer que el producto sea prácticamente invisible.
7. Imágenes débiles o poco profesionales
Las buenas imágenes venden. Y en autopartes, eso significa mostrar detalles, ángulos, materiales y diferencias entre versiones. La imagen principal debe cumplir con el estándar del marketplace (fondo blanco, sin logos) y, si es posible, complementarse con fotos en contexto o videos demostrativos. Esto genera confianza y reduce dudas al momento de la compra.
Distribuidores y fabricantes que invierten en la organización de su catálogo digital logran vender más, con menos errores y mayor agilidad. En un sector tan técnico como el de autopartes, la calidad de la información es lo que separa a quienes compiten de quienes lideran.